No hay viento favorable para el que no sabe dónde va. (Séneca)

  • Ya nadie tiene proyectos para la humanidad, suena hasta obsceno plantearlo, todos los objetivos de progreso global que hace un tiempo pertenecían al colectivo de la humanidad, ahora solo son un mar de ilusiones privativas casi siempre avocadas al fracaso, es ridículo afrontar problemas globales desde una perspectiva individual.